El estudio constituye un diagnóstico de los hábitos de uso de las TIC por parte de los menores: su conocimiento de los riesgos, su reacción ante los mismos y los hábitos o medidas de seguridad que adoptan en su utilización de las TIC. El análisis se lleva a cabo desde la doble óptica del propio menor y del padre o madre, como actor indispensable en la educación del hijo y en la concienciación y prevención.
Para la elaboración del estudio se ha utilizado una metodología basada en una combinación de técnicas cualitativa y cuantitativa. El análisis cualitativo incluye entrevistas en profundidad a 36 expertos (profesionales e instituciones) pertenecientes a diez áreas de conocimiento. El análisis cuantitativo, por su parte, contempla la aplicación de 1.250 encuestas, 625 a menores de entre 10 y 16 años, y 625 a uno de sus tutores legales: padre o madre.
Todo ello, para recabar información que permita formular recomendaciones de actuación con el objetivo de educar, formar y concienciar a los y las menores sobre la importancia de un Internet sin riesgos.