Descripción |
Hablar del machismo de los demás siempre es fácil, pero hacer una introspección en uno mismo es un ejercicio más complejo. Nadie quiere reconocerse como machista y, sin embargo, todos lo somos en mayor o menor medida. Más allá de sentirnos atacados por este hecho, debemos ponernos en contexto: todos hemos crecido en una estructura patriarcal que nos ha hecho normalizar el machismo. |