Descripción |
Las principales ciudades españolas reflejan en los nombres de sus calles una sociedad eminentemente desigual. De las más de 9.000 calles de Madrid, solo el 21% de las dedicadas a personas tienen nombre de mujer. Las dedicadas a hombres son el triple. El porcentaje de mujeres es similar en Barcelona —19%— y aún peor en Valencia, 10%. La desigualdad no es solo de número. El 83% de las mujeres que aparecen son santas, vírgenes o nuestras señoras. |